¿Cómo cuidar las botas de agua para que duren el máximo tiempo posible?

Las botas de agua son un calzado imprescindible en los días lluviosos, pero para que sigan siendo duraderas y estéticamente agradables, es importante cuidarlas adecuadamente. Después de cada uso, deben lavarse con agua tibia y un detergente suave para eliminar el barro y otras impurezas. No deben secarse sobre un radiador ni exponerse a la luz solar directa, ya que esto puede provocar grietas y pérdida de elasticidad del caucho.

El uso regular de productos especiales para el cuidado del caucho evita que se reseque y pierda su brillo. El interior de las botas debe ventilarse y puede espolvorearse con talco o utilizarse absorbentes de humedad para evitar malos olores. Guárdalas en un lugar seco y sombreado, preferiblemente en posición vertical o rellenas con papel para evitar deformaciones.

¡Con estos simples pasos, tus botas de agua se verán como nuevas durante muchas temporadas!